Bienvenidos nuevamente a nuestra serie en curso "Informe de estado de Ubisoft", donde la alta directiva sigue navegando en aguas turbulentas, pero al menos un dolor de cabeza persistente finalmente ha sido resuelto.
Ubisoft ha solucionado exitosamente los problemas de compatibilidad con Windows 11 24H2 que afectaban a varios títulos de Assassin's Creed, incluidos Origins y Valhalla. Estos problemas técnicos habían dejado varios juegos de Ubisoft inservibles en el último sistema operativo de Microsoft desde finales de 2024. La solución llegó mediante parches recién lanzados, anunciados directamente en las páginas de Steam de cada juego.
La respuesta de la comunidad de jugadores ante estas correcciones ha sido notablemente positiva, con secciones de comentarios sorprendentemente libres de críticas hacia Ubisoft, algo poco común dado que estos problemas fueron causados por Windows y no por el desarrollador. Aunque los jugadores expresan gratitud por la solución tan esperada, ambos juegos mantienen una calificación "Mixta" en las reseñas recientes de Steam.
Todas las miradas están puestas ahora en Assassin's Creed Shadows, cuyo reciente retraso hasta el 20 de marzo refleja el mayor enfoque de Ubisoft en el control de calidad. La compañía entiende claramente que este lanzamiento podría ser crucial para su futuro, esperando aprender de estos desafíos técnicos recientes para garantizar un camino más fluido para su próximo título insignia.